El español Carlos Sainz (Volkswagen Touareg) aseguró que la victoria final en el rally internacional Ruta de la Seda, que transcurrió por territorio ruso, había sido “un gran test para el Dakar”.“Estoy muy contento. Ha sido un gran test para el Dakar. El equipo y mi copiloto, Lucas Cruz, han hecho un magnífico trabajo”, señaló Sainz, que se alzó en enero pasado con su primera victoria en el Dakar.
Sainz, que también ganó la primera edición del Ruta de la Seda hace un año, comentó que la última cronometrada de hoy de 16 kilómetros había sido “un mero trámite”.
“La etapa transcurría por el cauce de un río. Salimos con mucha calma. No había necesidad de tomar riesgos y sufrir una avería debido a los cantos rodados”, dijo.
El miércoles fue muy duro
El piloto madrileño reconoció que la suerte del rally se decidió “en la etapa reina del miércoles”, en la que los pilotos estuvieron al volante durante “más de cinco horas”.
“El (sudafricano Giniel) De Villiers sufrió un accidente y tuvo que abandonar y (el qatarí) Al Attiyah se perdió entre las dunas”, dijo Sainz, que definió esa jornada como “una de las etapas más duras de mi carrera”.
Ahora, Sainz aseguró que es hora de “concentrarse” en la preparación del Dakar e intentar ganarlo por segundo año consecutivo.
“Por ahora, no voy a coger el coche. Tengo que operarme en la rodilla y prepararme físicamente. Iremos al Dakar con respeto y humildad, aunque ya lo hayamos ganado”, señaló.
Tras la disputa de ocho etapas y más de 2.000 kilómetros de especiales, Sainz comandó la clasificación general con 5 minutos y 48 segundos de ventaja sobre su compañero de equipo, Al Attiyah.
Fuente: Marca.com
Foto: micoche.com | Mediaracing
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